Corriendo por los 78 Concejos de Asturias: septiembre 2015

Etapa 58: Degaña - Ibias

Fecha 24.09.2015

Hoy madrugamos algo mas de lo habitual ya que tenemos un largo viaje por delante –estamos en el punto suroccidental más alejado de la capital- y, además, tenemos una de las mas largas etapas por delante.

Además del habitual compañero, Jesús Fernández, hoy nos acompaña también Kike Colunga que ya había hecho alguna etapa en bicicleta con nosotros anteriormente.

Salimos a las 07:30 de La Fresneda y sobre las 08:00 de la mañana de Montecanales (Oviedo) en dirección a León por la autopista del Huerna para salir nada mas pasar el túnel, pagar el peaje y pasar bajo el emblemático puente del embalse de Barrios de Luna en dirección a la Babia, este lugar fresquito donde disfrutaban de vacaciones los reyes de España.

Aunque el tiempo es espléndido, la temperatura por la meseta es muy baja, hasta 3º.

Atravesamos Villablino y Caboalles de Abajo (donde tantas veces había corrido mi hermano Jose Enrique como aficionado –y no se si como profesional- del ciclismo) y pasamos el puerto hacia Cerredo para finalmente llegar a Degaña, capital, la pequeña población que ya conocemos de la etapa anterior.

Aparcamos ante el Ayuntamiento y vamos a tomar un café al bar del pueblo. Observo que en el pueblo se mantienen los carteles recordando el asesinato de Sheila, la joven de este pueblo que apareció en un puerto de los alrededores y que todavía no ha sido esclarecido.

Tomamos un café, charlamos un rato con las chicas del bar y salimos hacia el coche a cambiarnos para, posteriormente, entrar en el Ayuntamiento a sellar.

Volvemos a charlar otro ratito con el funcionario aficionado a la bicicleta con quien yo había contactado telefónicamente unas semanas antes.

Tras intercambiar algunas opiniones, Paco Martín y yo tomamos la salida hacia San Antolín de Ibias por la pista que va por encima de la carretera y dejamos a nuestros amigos bajo un cielo “empedrado” frente al sol de primera mañana con intención de ir hacia Tormaleo a conocer la situación de esta zona con antiguas minas a cielo abierto.

CRONICA:

Inicio la etapa con una camiseta de manga larga sobre otra de manga corta, aunque ya me sobra en los primeros kilómetros y la recojo en la mochila de montaña que porto con un pequeño depósito de agua.

A la salida de la población pasamos frente a la iglesia y el cementerio y empezamos un ligero descenso. Pasamos por delante de un camino donde una mujer mayor se encuentra en cuclillas en una circunstancia un tanto peculiar.

Cruzamos la carretera en el punto kilométrico 1,15 km continuando por el camino real que desciende un poquito mas y comienza el ascenso hasta Rebollar (km. 3,4) donde volvemos a salir a la carretera AS-212.

Por el camino encontramos, el ya habitual, rebaño de ovejas cuidadas por un par de mastines.

Continuamos subiendo por la carretera, echando la vista atrás de vez en cuando para disfrutar de una espléndida vista sobre el valle de Degaña.

En el kilómetro 5,llegamos al Puerto del Campillo (1.078 m.), punto mas alto de la etapa, e iniciamos el descenso por una carretera con muy poco tráfico que permite ir relajado comentando con Paco Martín que conoce bastante bien la zona y recuerda, mirando los bosques de los alrededores, las rutas de Bicicleta de Montaña que hizo hace varios años junto con mi otro compañero y amigo, Enrique Gutierrez Sans (Kike-cajeros).

Mirando al frente trato de adivinar por donde irá nuestra ruta por el valle que he recorrido virtualmente varias veces en los últimos días sobre mi ordenador.

En el descenso nos encontramos una señalización de la ruta GR 203 “Por donde camina el oso” que es, mas o menos por donde circularemos nosotros.

Atravesamos Tablado, Sisterna, … nos entra la duda de si debiéramos tomar el desvío a Bao….. (mas adelante confirmamos que no) y seguimos por la AS-212 hasta el punto 12,7 km donde, a la altura de una marquesina de autobús que recuerdo perfectamente de haber visto en Street View de Google, abandonamos la carretera por la derecha y tomamos un camino en fuerte descenso hasta el fondo del valle.

Llevábamos mas de 12 km y me extrañaba que no nos hubiera alcanzado el coche con nuestros amigos. Justo cuando hemos abandonado la carretera oigo un ruido de motor conocido y vemos pasar por la carretera mi coche cuando ellos ya no nos pueden ver.

Fuerte descenso por camino en medio del bosque hasta llegar al fondo donde enlazamos con un carreterina local (no lleva asfaltada mas de 4 años) que nos llevará por esa ladera soleada del valle que corre enfrente y paralela a la ruta que lleva la carretera general.

Llegamos al fondo en el km 15 e iniciamos un largo ascenso a lo largo de otros 15 km más.

Bonitos y agrestes paisajes. Grupos de colmenas perfectamente cerradas con líneas eléctricas para protegerlas de los osos.

Atravesamos Villardecendias y mas adelante Omente donde los comentarios de un parroquiano –y mi desconocimiento de la zona- nos van a meter en un cierto despiste en la siguiente aldea, Alguerno.

Por esta zona, muy orientada al sur, corremos junto a estupendos viñedos que lucen un magnífico aspecto con sus uvas ya muy maduras.

Por aquí está la única zona de la carretera que no está asfaltada.

Por estos lares encontramos a un par de ciclistas arreglando un pinchazo y nos informan de que son de Murcia y llevan unos días haciendo un circuito que iniciaron en los puertos de Somiedo y continuaron por las carreteras de la zona. Son aficionados que han oído hablar de nuestros puertos y están disfrutando de la dureza y belleza de nuestro Principado. Ya están finalizando y retornarán a su tierra en los próximos días con los buenos recuerdos de su aventura. Se sorprenden de habernos encontrado pues dicen que llevaban mucho tiempo sin encontrar a nadie. Unas fotos y continuamos viaje

En el punto kilométrico 25,5, antes de llegar a Alguero, y según mi mapa y un poco despistados por el comentario del vecino de Omente, abandonamos la carretera y ascendemos por un camino a la derecha y por encima de la población de Alguero.

Pista de tierra y piedra bastante bonito.

Un par de kilómetros mas allá –y mas arriba- miramos hacia adelante y hacia abajo y vemos que hay una nueva carretera que va de Alguero a Bustelo –nuestro próximo destino- con lo que nos damos cuenta de que deberíamos haber tomado el camino de abajo, mas corto y menos duro.

Finalmente yo decido que debemos continuar y no retroceder hacia la aldea anterior ya que asi lo tenia planificado. Mas arriba ya me doy cuenta de que he cometido un error ya que vamos a hacer unos 4 kms mas y aprox. 150 m mas de altitud (de 650 m a 800 m, aproximadamente). Continuamos.

Por el camino vemos algunos frutos de gran colorido que suponemos son del madroño pero que a la postre nos entra alguna duda de si serán comestibles y que no nos atrevemos mas que a probar un poquito. Las fotos que les realizamos nos confirman posteriormente que, efectivamente, eran estos frutos y que nos los podíamos haber comido perfectamente.

Recibimos una llamada telefónica de nuestros amigos para ver por donde vamos. Estamos haciendo este rodeo por las alturas cuando nos comentan que están a nuestra espalda puesto que ellos han pasado por la carretera de Bustelo a Alguero y están preguntando a un parroquiano si nos había visto. Les digo que vuelvan hacia atrás y ya nos encontraremos en Bustelo donde se encuentran ambos caminos.

En nuestro descenso por las pistas del alto de la montaña vemos pasar el coche en dirección a Bustelo donde nos encontramos. Dado que es tarde y nos van a cerrar el Ayuntamiento, y que ya llevamos casi 40 kilómetros de etapa decidimos coger la bici de montaña que llevan en la baca del coche y hacer un rápido descenso hasta San Antolín de Ibias donde llegamos a falta de 2 minutos para el cierre del Ayuntamiento (a las 15:00 horas). De hecho estando en el Ayuntamiento cierra tanto las oficinas de la Casa Consistorial como la oficina de la Cajastur de donde vemos salir a nuestros antiguos compañeros.

Un baño rápido en un lavadero que se encuentra en la parte de atrás del Ayuntamiento, junto al río, y vamos a intentar comer en una casa rural de una aldea próxima. Ya no nos quieren atender y volvemos a la capital para comer en un bar próximo al Ayuntamiento donde nos ofrecen un estupendo pote y saludo a los compañeros de Cajastur que también están dando buena cuenta del menú.

Tras la comida, otro largo retorno en este caso por Asturias ya que nos dirigimos hacia Cangas del Narcea pasando por el puerto del Pozo de las Mujeres Muertas que algunos no conocíamos y cuyo nombre siempre nos llamó la atención. Hacemos una foto para dejar constancia de nuestro paso y continuamos ruta

RESUMEN:

Etapa muy lejana y muy larga, lo que implica tiempo de viaje y tiempo de recorrido de la propia etapa. Al final, según mi Garmin, salieron 42,73 Kms. que realizamos en un tiempo de 04:46 horas (04:30 de tiempo en movimiento) con buen tiempo metereológico: sol todo el día pero sin apretar demasiado el calor.

Fue prácticamente una maratón de montaña que, no obstante, no se hizo demasiado pesada gracias a lo bonito de la ruta en este momento ya bastante otoñal

El firme fue bueno toda la etapa, con bastante asfalto aunque de carreteras secundarias y con algunas pistas forestales que se agradecen por lo que suponen de descanso para las, ya “machacadas”, plantas de los pies.

En cuanto al perfil general fue de descenso puesto que salimos de Degaña a 851 m de altitud y terminamos en San Antolín de Ibias a 304 m de altitud pero tuvo algunos sube y baja de cierta importancia entre los que destaca el punto mas alto que fue el puerto Alto del Campillo (1.078 m) lo que supuso después un largo descenso.

Al fin hemos terminado estas largas etapas en el Suroccidente de Asturias y ahora solo nos queda el tramo final de Arriondas a Siero, municipio al que pertenezco y donde he partido, tras unas pequeñas y cercanas etapas que espero hacer en el mes de Noviembre tras correr la Behovia-San Sebastian a principios del mes